Hasta el año pasado, nunca había dedicado más de 5 segundos en pensar en mi pelo, o en mi peinado... usualmente lo prefería tener corto, y con un peinado que no tomara mucho tiempo o mucho mantenimiento... y cuando me diagnosticaron de cáncer y pensé en la idea de que posiblemente perdería mi cabello, me moría de ganas de probar un nuevo corte... o de raparlo, sin embargo me di cuenta de que aunque para mi no tenía la más mínima importancia, para mis seres queridos si; Se sentía como si al querer cortármelo estuviera, de antemano dándome por vencido, así que en honor al cariño que le tengo a los míos, decidí que cortármelo sería mi última opción...

Ya llevo dos meses en Nicaragua, dos meses luego de la radioterapia y mi pelo sigue creciendo, esta más largo de lo que lo he tenido en años... así que he decidido hacer algo de provecho con él y ayudar a que otras personas sean felices aún con las situaciones que tienen que enfrentar... Así que en cuanto tenga el largo requerido volveré a lucir mi cabeza pelona y hare feliz a alguien más... ¿Quién se anima a acompañarme en esta idea y hacer feliz a una persona con este regalo de amor?,