Hoy cumplo 15 días de haber llegado a San Salvador, y ya llevo 8 sesiones de radioterapia, debo reconocer que aunque las radioterapias en sí mismas no duelen, los efectos secundarios no son agradables, pero no me queda otra cosa por hacer... aunque extraño como loca mi casa y a los míos, y sueño con el momento en que pueda estar bajo el sol otra vez, de preferencia bañandome en las aguas de Majagual con la gente a la que quiero... mientras tanto, ver a tantas personas luchando por mi vida, me ha hecho reflexionar... y tomar decisiones, que espero poder llevar a cabo cuando todo esto acabe al fin...

Mientras tanto me he encontrado esta lámina en facebook y me parece un buen mantra para estos tiempos de mi vida...