Últimamente me he sentido como dentro de la obra de Kafka, sintiendo como cambio por dentro... quizá por fuera, y es que llevo unos dos meses tratando de adaptarme a todos los cambios de mi vida... tratando de manejar el enojo, el dolor, la frustración, la vergüenza.... y aún así, a ojos de los demás, parecer fuerte y segura de mi misma...

He cambiado, al principio fue sólo una sospecha, pero ahora estoy segura de eso... he dejado de ser la mujer dulce y juguetona que confiaba en la gente, y me he convertido para aquellos que no son cercanos a mi, en alguien más sarcástica, seria y enojada... he tenido que serlo para sobrevivir a todo lo que vino...

Aún hoy extraño a la que fui, pero ya no hay vuelta atrás... Esta es la nueva yo, más segura, más desconfiada y algo loca (esa parte espero no perderla)... y rezando por no convertirme en cucaracha... (jejejejejeje)...

Mi nuevo Escudo... Se acabaron los días de gatitas dulces, y llego el momento de los lobos...