Este fin de semana me he leído de cabo a rabo las 651 páginas de la última novela de Millenium, Me encanto reencontrarme con uno de mis personajes literarios favoritos de los últimos tiempos, y aunque sigue siendo la misma de antes, ha cambiado, sin embargo, dado que Stieg Larsson esta muerto y no podrá volver a escribir, debo conformarme con esta versión que hace David Lagercrantz de ella, que no es que este mal, pero es diferente...

Hubo, para mi, algunas preguntas sin responder en esta novela... personajes que ya no aparecieron.... por ejemplo, en lo personal me habría gustado saber un poco más de Mónica Figuerola, de Miriam Wu, o de Paolo Roberto, y a cambio nos dan toda una constelación de nuevos secundarios, pero su presencia es tan fugaz en la historia que no da tiempo a que se les tome cariño.

En fin, en general, sigo enamorada del personaje y de la saga, que aunque no sea igual... a la larga sigue siendo la misma.