Cada vez más me sorprende como han cambiado mis sueños y mis gustos a lo largo de mis 32 años de vida... y no es que no sea normal que cambiaran, es sólo que se han transformado de la noche al día, es así como he pasado de soñar en vivir en Nueva York a soñar con vivir en Totogalpa... o con construir mi casa en Somoto... Será eso la vejez?